Es muy común escuchar hablar de la procrastinación y esa tendencia que tenemos como humanos a aplazar lo importante. Ahora, ¿alguna vez escuchaste hablar de la PREcrastinación? La PREcrastinación es justamente lo opuesto y es el comportamiento que lleva a sentir una presión por empezar a hacer una tarea inmediatamente, a terminarla antes de tiempo o antes de la fecha límite.
¿Cuál es el origen?
En 2014 el profesor David Rosenbaum de la Universidad de California la definió como la tendencia que se tiene a cumplir con una meta a la primera oportunidad, aún cuando ese cumplimiento implique un esfuerzo adicional. Existen varias causas del comportamiento: ser meticulosos, buscar la perfección; la ansiedad por demostrar responsabilidad y liberar la mente de los pendientes.
¿Y cuál es el problema?
Pero si se termina antes o igual se cumple con la metas ¿cuál es el problema de PREcrastinar? Un aspecto negativo es que muchas veces nos sentimos atraídos a ejecutar aquellas actividades fáciles de hacer simplemente para sentirnos ocupados. Aún más relevante es el hecho de usar tiempo de descanso o de familia en trabajo que puede esperar, simplemente por adelantarlo innecesariamente; y esto puede hacernos caer en agotamiento o estrés. Finalmente si trabajamos en equipo, el PREcrastinador puede ser una rueda suelta que adelanta el trabajo y atenta contra la armonía laboral.
¿Qué se puede hacer?
Tal y como lo decimos frecuentemente es muy importante tener la capacidad de observar nuestros comportamientos, reconocer qué se puede mejorar, para luego buscar transformarlos. Como técnica, es muy recomendable tener una relación directa entre la lista de pendientes y la agenda, creando un espacio temporal para desarrollar actividades usando el calendario. No es lo mismo tener un pendiente como “escribir el artículo de esta semana”, que tenerlo en la agenda programado para el próximo martes de 2 a 3 de la tarde. Esa programación evitará comenzar con la tarea antes de tiempo o mejor, a destiempo.
La segunda estrategia para evitar la PREcrastinación es revisar la carga de trabajo. Muchas veces nos sentimos acorralados por las responsabilidades, el tiempo no alcanza y por lo tanto aprovechamos cualquier momento para adelantar o anticiparnos al trabajo.. Así que es una oportunidad para revisar si estamos haciendo tareas innecesarias, si pasamos buena parte del tiempo contestando mensajes o correos tan pronto como nos llegan o si hay tareas que otros pueden hacer por nosotros: delegar, tercerizar o automatizar.
Todos en algún momento procrastinamos o PREcrastinamos y eso no tiene porqué ser negativo. El punto es convertir el comportamiento en algo compulsivo que nos lleve al desequilibrio en algún aspecto de nuestra vida. Ese es el punto que debemos observar.
Mauricio Vargas
Enfócate y Logra Más
0 Comentarios
Dejar un comentario